Como el huracán de Deleuze que avanza alegremente
como el atardecer siempre distinto de mi balcón
como la música, quizá como la música
como el viento que nos vuelve viaje
como el mar que nos revuelca
y nos deja de cara al mundo
de un momento a otro
derivando
como el atardecer siempre distinto de mi balcón
como la música, quizá como la música
como el viento que nos vuelve viaje
como el mar que nos revuelca
y nos deja de cara al mundo
de un momento a otro
señales metafóricas de vos misma
ResponderEliminarplanean en mí como aeroplanos musicales imprevistos
tiño mi Sol mayor con tu poesía
y me guardo las milongas en Re,
para tu próxima publicación.