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¿Y qué tiene de malo escribir poesía con el denileador de ojos?
es que iba a explotar
un pelele contaba chistes de suegras
y la señora del fondo se reía, morada
y el mozo le servía una porción más grande a la del pantalón blanco
y a la jefa de sección le cabeceaba el de tesorería
invitándola a bailar el bombón asesino
y ahí el marido
impávido
tosiendo el vermú
tanta poesía
iba a explotar
en qué momento la forma de las cosas obliga a correr
el olor a pucho del salón
el perfume del contador
la del pantalón blanco que escribe cartas al mozo
una servilleta que abolla y muere
se me llenó la cabeza, mirá
tuve que ir al baño y hacerlo
no avisa la poesía
cuando encuentre una birome lo paso
ya está vivo, mientras tanto
Doña Bólzan: esto es simplemente genial! No se puede derrochar semejante escena poética.
ResponderEliminarCuando vienen las ganas de "puesiar", es mejor correr al baño, y evacuarla con delineador, lápiz de labio, o hasta el dedo, si no queda otra.
Realmente me encantó.
wow!!
ResponderEliminarpero qué excelente!!
no tiene nada de malo, escribir con el delineador de ojos, en servilletas abajo de la mesa, en el dorso de la mano, donde sea.
los versos vienen sin aviso y hay que hacerles lugar.
me encantaron sus palabras, señorita!
Bozán:
ResponderEliminarGenial!! Una escena que, si no hubiera sido tan bien maquillada por usté, parecería una escena cualquiera.
Ojo! Todo bien con escribir donde sea como sea. Pero usté bien sabe el riesgo que se corre.
Abrazos
La poesía no avisa. Explota.
ResponderEliminarEscribir algo más después de eso no tiene sentido.
Prefiero regalarle en la próxima la sonrisa de paz que me despertó esta explosión.
jajaja! La verdad querida mariana, mariana, mariana, me encantó esa escena!! Te acordás que estuvimos charlando sobre eso la otra vez? Te falta escribir algo sobre tus experiencias yoguísticas, no voy a decir más. Seguí escribiendo donde sea y cuando sea que lo hacés hermosamente!
ResponderEliminarBesos amiga.