viernes

Qué poca cosa ahora el español
Es moneda corriente, gastada
Las palabras son de todos
Las palabras
¿O soy yo la de las formas vacías?
Qué trabajo dar con lo que quiero decir
Más honesto es hablar en otro idioma a veces
Que en la propia lengua
Habla sola
Dice por mí
Aprendió a hablar, antes que yo.

Julieta Lerman

Me turba la idea que algo pueda ser por fuera de las palabras.
Quiero darle forma, hacerlo transcurrir por el vasto campo del idioma.
Asirlo, darle lugar, ponerlo a prueba.
Hay algo de placebo en las palabras, hay un mar calmo, hay un espanto dicho, sonoramente vivo.

Es por eso que me quedo con la bruma, no la puedo tocar, la siento a pesar de mí y es dinámica, insurgente, temblorosa.
Es mercurio en las manos.

Pienso hasta cuándo seré presa,
hasta cuándo será misterio
que vibra insolente
por los campos donde el lenguaje no llega

la sangre me fluye sin nombre, sin color
el cuerpo es la respuesta
más inmediata

recurro a los idiomas
me deslizo por palabras que otros usaron para decir otras cosas
lo creo muerto

pero cuando está ahí
ahí
vuelvo a sentirlo
me ocupa el cuerpo
me estaquea como un rayo
se actualiza

podrían ser pájaros
podría ser la música
podría ser el amor,

en el peor de los casos.

1 comentario:

  1. ay, los casos... no sé si es el mejor o el peor, pero el caso es que esta escasez de palabras parece rondarnos, querida. tendremos que buscar diccionarios nuevos? abrazos!

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maréese un rato, maréese