—...Si no, tenés ésta, la almohada inteligente, con el interior de espuma de alta memoria y una suave funda de tejido de punto, que copia la forma de la cabeza durante el descanso y vuelve a su forma original una vez que levantás la cabeza... ideal para cervicales rectificadas.
—¿Inteligente, dijo?
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(diálogo tristemente verídico)
Copia, copia, copia... y vuelve a su forma orginal. Qué aprendió? Nada! si es una almohada. Sí, es que los objetos inertes obtienen nuestras cualidades por hacer justamente lo contrario a nosotros. Ahora bien, calificarla de inteligente es como decir que tal o cual usa mucho la cabeza porque es modelo para un catálogo de gorras...
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